En la Estación del Norte, el traslado de un viejo mafioso se convierte en una pesadilla. Si bien la operación fue supervisada por Marion, el prisionero recibió un disparo tan pronto como se bajó del tren. La brigada ferroviaria se encuentra bajo una investigación interna para entender las razones del fiasco. Pero a Marion no le importa, nada significa más para ella que este hombre, Víctor, del que vive locamente enamorada desde hace varias semanas y que ha desaparecido sin dejar rastro.